La
interferencia se produce cuando se superponen en forma simultánea dos o más
trenes de ondas. El fenómeno de interferencia es una prueba contundente para
comprobar si un movimiento es ondulatorio o no.
Interferencia
constructiva
Se
presenta cuando se superponen dos movimientos ondulatorios de la misma
frecuencia y longitud de onda, que llevan el mismo sentido. Las dos ondas que
se superponen, están representadas por las líneas punteadas.
La
resultante (línea continua) es una onda de mayor amplitud, pues donde se
encuentran las crestas, al sumar las amplitudes negativas donde se encuentran
los valles, se obtiene un valle mayor. La onda resultante tiene una mayor
amplitud, pero conserva la misma frecuencia.
Interferencia
destructiva
Se presenta cuando se superponen dos movimientos
ondulatorios que tienen una diferencia de fase. Por ejemplo, al superponerse
una cresta y un valle de diferente amplitud, con una diferencia de fase de
media longitud de onda, la onda resultante tendrá una menor amplitud. Pero sí
se superponen dos ondas de la misma amplitud, con una diferencia de fase de
media longitud de onda, o sea 180°, la suma vectorial de sus amplitudes
contrarias será igual a cero, por lo que la onda resultante tendrá una amplitud
nula. Esto sucede cuando la cresta de una onda coincide con el valle de la otra
y son de la misma amplitud.